GESTIÓN DEL ESTRÉS
Tal vez ese malestar que sientes, lo quemado que te encuentras, la sensación de ir a trabajar o andar por la vida sin ilusión, o encontrarte mal física o mentalmente, sea debido a un problema de estrés.
El estrés es la respuesta del organismo, que moviliza sus recursos, ante situaciones que suponen demandas importantes.
Estas demandas que provocan la respuesta de estrés pueden ser:
- Hacer frente a una pérdida
- Afrontar una amenaza
- Enfrentarse a un reto
Esta reacción implica respuestas fisiológicas, cognitivas y motoras. Es una reacción adaptativa para responder a las demandas que se nos plantean y es necesaria para solucionar problemas que se nos encontramos en la vida.
Se trata de una respuesta que depende del balance que realiza el organismo entre la demanda que se presenta y los recursos que tenemos para afrontarla.
Si la demanda es difícil porque no hay tiempo suficiente, es muy exigente o complicada y no nos vemos capacitados, por falta de habilidades y conocimientos, tiempo escaso, exceso de tareas, pensamientos distorsionados o improductivos, emociones mal gestionadas, entonces la respuesta de estrés será casi siempre problemática y se producirán problemas físicos y psicológicos.
Si la reacción es frecuente, intensa o duradera, se pueden producir problemas de desgaste de los recursos y es cuando aparecen los problemas del estrés que surgen en diversas circunstancias:
- Exposición a numerosas situaciones amenazantes, como novedad, incertidumbre, ambigüedad.
- Hacer interpretaciones erróneas sobre las situaciones que la vida nos plantea.
- Activación fisiológica. Algo que en las sociedades actuales requiere una respuesta física baja. Los recursos activados no se utilizan y se acumulan en el organismo.
- La persona emite respuestas inadecuadas, por desconocimiento, momento inadecuado, mala gestión emocional, barreras que impiden la respuesta más eficaz.
Los problemas que ocasiona el estrés pueden ser físicos (trastornos gástricos, cardiovasculares, debilidad del sistema inmunológico, dolores…), psicológicos (ansiedad, estado de ánimo, adicciones, relaciones con los demás…), trastornos adaptativos o traumas.
La Psicología se ha ocupado desde sus inicios del estrés y la forma de gestionarlo y/o tratarlo está bien establecida por su eficacia.
El TRATAMIENTO/GESTION DEL ESTRÉS, que tiene una efectividad clara y demostrada, se compone de:
- Técnicas de modificación de las situaciones. Mejora del ambiente. Técnicas de Gestión del Tiempo y tareas.
- Técnicas para reducir la activación del organismo. Relajación (con sus diversas modalidades). Atención plena.
- Técnicas para modificar las respuestas cognitivas. Creencias poco saludables, pensamientos improductivos (preocupación, rumiación…), filtros o distorsiones en la forma de percibir y pensar. Problemas en la evaluación de nuestras habilidades y recursos. Problemas en la elección de la mejor respuesta ante la situación.
- Técnicas de gestión y regulación emocional. Autocontrol.
- Técnicas de solución de problemas.
- Habilidades sociales. Asertividad. Lenguaje corporal (Comunicación no verbal).
La Psicología ofrece soluciones que ha creado con sus investigaciones y práctica, y que funcionan.
Paulino del Campo. Psicólogo-Psicoterapeuta.